Quién era Catalina Gutiérrez, la joven influencer asesinada en Córdoba

El crimen de Catalina Gutiérrez, la influencer y estudiante de Arquitectura hallada asesinada este jueves por la madrugada en Córdoba, conmocionó al país. La joven, de 21 años, era hija de un conocido arquitecto de esa provincia y tenía un activo perfil en redes sociales, donde mostraba sus viajes por el país, subía videos promocionando productos y eventos y compartía sus gustos musicales con sus más de 80 mil seguidores.

Catalina vivía con su familia en el barrio Inaudi del sur de la capital cordobesa, tenía 21 años, y era estudiante de la carrera de Arquitectura en la Universidad Nacional de Córdoba (UNC). Fue precisamente en esa casa de altos estudios donde conoció a Néstor Daniel Aguilar Soto, el único detenido como sospechoso de ser autor del crimen —a raíz de su propia confesión ante las autoridadades—.

Con su compañero de facultad, apodado "Nuni", ella había forjado un estrecho vínculo de amistad. Fuentes cercanas a la víctima contaron a La Voz que en agosto del año pasado habían realizado un viaje en grupo a Rosario.

Catalina estaba de novia con otro compañero de la facultad, agregaron, pero Soto la acosaba de vez en cuando. Mucho tiempo antes, la joven cordobesa había tenido un noviazgo de siete años con un joven de la localidad serrana de Achiras, de donde era oriunda.

El padre de Catalina, Marcelo Gutiérrez, es un reconocido arquitecto en la región, ya que encabezó el proyecto del nuevo Concejo Deliberante, inaugurado hace pocas semanas.

Por otra parte, la joven cordobesa era muy activa y popular en las redes sociales: en su cuenta de Instagram, donde promocionaba fiestas, productos y viajes por Buenos Aires, Rosario y Brasil, tenía más de 84 mil seguidores.

En una publicación en las redes que realizó la UNC para enviar sus condolencias a la familia, se agolpan los mensajes de distintos usuarios que piden "Justicia por Catalina" y una veloz condena para el responsable de su muerte.

La Voz precisó que la familia decidió velar los restos de su hija en la capital de Córdoba. Desde el jueves por la noche se realizaba en Casa D’spontin, del barrio Nueva Córdoba. Luego, su cuerpo será cremado y sus cenizas serán esparcidas en Achiras. Catalina y su familia tienen una casa en esa zona y solían pasar distintas temporadas en la localidad. Además, sus tíos radican entre esa localidad y Sampacho.

El cuerpo de Catalina Gutiérrez fue encontrado el jueves por la madrugada dentro del auto de su madre en el barrio Ampliación Kennedy de la ciudad de Córdoba, luego de que la familia alertara a la Policía local por su desaparición desde hacía horas.

Había sido vista por última vez el miércoles por la noche cuando le dijo a sus familiares que se iba a reunir con amigos en el shopping Patio Olmos, motivo por el que le había pedido a su madre que le prestara el auto. Sin embargo, nunca llegó a la reunión.

Para dar con su paradero, la familia de Catalina activó el sistema de rastreo de su teléfono Iphone, que arrojó como localización un descampado a la altura de la calle Pedro Echagüe al 3900.

Las autoridades policiales se trasladaron inmediatamente al descampado, donde encontraron el Renault Clio gris en el que se trasladaba la joven y, adentro del vehículo, su cuerpo sin vida.

"El cadáver estaba en el asiento posterior”, señalaron fuentes del caso, que indicaron también que el auto presentaba signos de un intento de incendio.

Por el caso fue detenido Daniel Aguilar Soto, un joven de 21 años amigo de la estudiante, quien terminó confesando el crimen, aunque no trascendió si se refirió o no al intento de incendio del auto. A priori, el fiscal José Mana lo imputó por supuesto homicidio simple y lo mandó al Establecimiento Penitenciario N° 9, de donde sería enviado a la Cárcel de Bouwer. Sin embargo, se estima que la causa será girada en las próximas horas a una fiscalía de Violencia Familiar ante la sospecha de que se trató de un femicidio. En ese sentido, todo indica que la imputación en contra de Soto se agravará a esa figura penal. De confirmarse, sería el quinto femicidio en Córdoba en 2024, según La Voz.

La hipótesis más fuerte de la Fiscalía es que Néstor Soto habría asesinado a su amiga en la noche del miércoles luego de que ella lo pasara a buscar por su casa. Los investigadores creen que el joven habría querido mantener un encuentro con ella y, en esas circunstancias, la habría asesinado.

La presunción es que la habría golpeado y estrangulado. Según los resultados preliminares de la autopsia, la causa fehaciente de la muerte sería asfixia por estrangulamiento. Por el momento no se pudo determinar si la acción fue realizada con la ayuda de las manos o mediante otros elementos que pudieron haber sido empleados por el agresor, se indicó.

Los profesionales advirtieron que el cadáver presentaba múltiples lesiones en diferentes aéreas. También posee quemaduras, que se habrían producido luego del deceso. Por otra parte, el parte de la autopsia descarta que la víctima haya sufrido abuso sexual, según lo publicado por Perfil Córdoba.

El criminal habría cargado posteriormente el cuerpo en el Renault Clio gris y lo habría trasladado a un descampado ubicado a un par de cuadras en Ampliación Kennedy. En el lugar habría intentado prender fuego el coche con alcohol para ocultar pruebas y desviar la pesquisa. No obstante, las llamas, que se extendieron en el interior, se terminaron apagando. Posteriormente, el joven se habría marchado, según fuentes de la causa.

Mientras Catalina seguía desaparecida, la Jefatura de Policía tomaba testimonios a amigos y allegados, y Soto habría terminado incriminándose tras decir que la joven era el amor de su vida, según fuentes de la causa. Algunas versiones dan cuenta de que habría confesado. No hay confirmaciones, en ese sentido.

Medios locales indican que la familia Gutiérrez reclama que se esclarezca el crimen y que se condene al acusado a la máxima pena. Asimsimo, el padre de la joven señaló que el acusado iba a su casa de manera periódica.