Gimnasia lo ganó con carácter y sumó su primera alegría en el Clausura
Gastón Suso marcó el único gol en un partido que tuvo a Gimnasia como claro dominador. El equipo de Alejandro Orfila mostró su mejor versión del año, ganó con justicia 1-0 y sumó su primera victoria en el Torneo Clausura.
Gimnasia rompió el cero en la tercera fecha del Torneo Clausura y lo hizo a lo grande: superó a un Independiente siempre competitivo, jugó con intensidad durante los 100 minutos y terminó festejando con su gente en el Bosque. El único gol de la tarde lo marcó de cabeza Gastón Suso a los 24 minutos del primer tiempo, tras un preciso córner ejecutado por Juan Pintado.
Desde el primer minuto, el equipo de Alejandro Orfila mostró decisión para plantarse en campo rival. Merlo y Panaro avisaron con chances claras, y luego Garayalde y Torres estuvieron cerca, pero el palo y Rey se lo negaron. El dominio era absoluto, y el gol terminó siendo la consecuencia lógica de un arranque arrollador.
Con orden, presión alta y dinámica por las bandas, el Lobo jugó quizás su mejor tramo del año. Independiente no lograba acomodarse, y aunque intentó reaccionar, su producción ofensiva fue contenida con solvencia por la defensa local.
En el segundo tiempo, Briasco estrelló un remate en el palo que pudo haber sentenciado el encuentro. Luego, Gimnasia se replegó con inteligencia, esperando espacios para contraatacar. El ingreso de Augusto Max le dio equilibrio al mediocampo y cerró los caminos para un Rojo que cayó en la impaciencia y dependió más de arrestos individuales que de juego colectivo.
El equipo de Vaccari manejó más la pelota en el complemento, pero no generó peligro real. La defensa albiazul se mantuvo firme, y ni los múltiples cambios ni los empujes finales lograron quebrar la resistencia del local. Gimnasia supo sufrir, se plantó con carácter y logró su primera victoria del torneo, fundamental para ganar confianza y empezar a trepar en la tabla.